Me pregunto que es lo que en verdad busca, es patética, no tiene vida propia, actúa como si fuese mi sombra, sin originalidad, sin sentido propio, sólo, copia.
Me persigue, no me deja en paz, sólo lo hace para perturbarme, por que otro no puede ser su fin.
No tiene alma, no piensa por si misma, no se conoce, sólo conoce mi personalidad, y la quiere, entonces copia.
Pero no puede reemplazarme, no puede formar parte de mi cuerpo y de mi alma, por lo que únicamente se conforma con quedar absurda a mi lado, como una sombra, como mi sombra.
-no te cansas nunca, ¿verdad?- le dije
No se atrevió a contestar, pero yo sabía su respuesta, era como una fragancia comprada a la vuelta de la esquina, no era importada, sino una simple copia.
-¿acaso, pretendes acabar con mi vida?- le volví a gritar
Ignoró mi pregunta, era lo único que podía ignorar de mí, mis preguntas, ya que el resto, lo repetía todo, como una máquina.
-No necesitas de mí, tú también tienes alma, y no disfrutas de ella tal y como es, no trates de forzarla a ser igual a la mía- le dije
Me miró, su mirada era resentida, nada le bastaba. Sabía que iba a seguir copiando, sin importar lo que yo pudiera decirle, por que era una sombra para mi, una que nunca iba a salir a la luz para mostrar su brillo propio, simplemente se había convertido en mí sombra.
♦(Anna D. L)♦